Con la eliminación de equipos poderosos como el Manchester City, Atalanta y Juventus en los dieciseisavos de final, la Champions League 2025 se ha abierto aún más y se ha vuelto impredecible. En este escenario, la Inteligencia Artificial Gemini coloca al Barcelona como el equipo que se perfila como uno de los grandes favoritos, gracias a su solidez defensiva y la brillantez de jugadores como Lamine Yamal.
Las razones por las que Barcelona es favorito
Forma de juego
El estilo de juego implementado por Hansi Flick en el Barcelona se caracteriza por un equilibrio entre la presión alta y la posesión fluida del balón. El entrenador alemán ha logrado consolidar un sistema que prioriza la recuperación rápida de la pelota y la verticalidad en los ataques, con un enfoque dinámico y ofensivo.
Los jugadores del Barça, bajo su mando, buscan mantener la posesión de la pelota sin perder agresividad al momento de presionar al rival, lo que les permite recuperar rápidamente la posesión y crear ocasiones de gol a través de combinaciones rápidas.
Además, Flick ha conseguido darle un toque de versatilidad al equipo, permitiendo a las líneas ser compactas sin perder la capacidad de ser expansivas cuando el juego lo requiere, lo que ha resultado en un Barcelona impredecible y difícil de detener.
Estrellas de su equipo
¿Arbitraje?
Otro de los puntos polémicos que podrían adjudicársele al Barcelona para ampliar su favoritismo para ser campeón de la Champions son los beneficios arbitrales. A lo largo de los años, el Barcelona ha sido objeto de diversas controversias y uno de los episodios más comentados ocurrió en la edición de 2009, durante los cuartos de final contra el Chelsea.
En ese partido, un polémico penalti no señalado a favor de los londinenses y un gol de Andrés Iniesta en los últimos minutos, que les permitió avanzar a la final, desataron una gran polémica. Muchos argumentaron que el arbitraje favoreció al Barcelona, ya que decisiones clave como la no expulsión de un jugador azulgrana y varias faltas no sancionadas a favor del Chelsea generaron dudas sobre la imparcialidad del arbitraje.
Otro incidente que sigue siendo debatido ocurrió en 2018, su enfrentamiento contra la Roma en cuartos de final vio cómo un gol polémico de Luis Suárez fue validado a pesar de una clara falta sobre el defensor.
En 2019, durante la semifinal contra el Liverpool, un gol anulado por fuera de lugar a favor de los ingleses también fue muy discutido, con algunos sugiriendo que el árbitro favoreció al Barcelona.
Factor económico
Si el Barcelona se consagrara campeón de la Champions League, los beneficios económicos para la UEFA serían considerables, especialmente en términos de derechos de transmisión. En las últimas ediciones del torneo, los ingresos por derechos de televisión han alcanzado cifras cercanas a los 2.000 millones de euros anuales, de los cuales una parte significativa se distribuye entre los clubes según su rendimiento.
Un equipo de la magnitud del Barcelona atrae a grandes marcas globales, que estarían dispuestas a aumentar sus inversiones en publicidad y asociaciones con la UEFA, lo que podría traducirse en millones de euros adicionales. Además, las finales y rondas avanzadas del torneo generan ingresos significativos a través de la venta de entradas, merchandising oficial y diversas campañas promocionales.